Sª Pepita Jiménez
Bar[celo]na
San Boy, marzo 28 de [18]45
Soy enramador: es estilo en ese pueblo que por la fiestas de Corpus paguen la luminaria de la iglesia los parroquianos de esta manera:
Completas de la vigilia y oficio en la mañana de Corpus, la paga la obra; completas del jueves y oficio del viernes, dos casadas, una del pueblo y otra de fuera (de pagés); el día siguiente la pagan las solteras; el otro los solteros (yo y uno de la Serra); los casados después; vienen los parayres luego; las cofradías; y, últimamente, los capellanes.
En todos estos días los enramadors (que así nos llamamos los que debemos pagar) adornan a su capricho la iglesia, poniendo lo que les da la gana y mudando de idea cada día. Yo no puedo darte una idea de esos adornos, porque no los he visto nunca, pero (dicen) que en eso tienen gusto, mas a mi me parece que debe ser un amontonamiento de bonichs y el que más puede amontonar aquel gana. Lo cierto es que ya me han pedido el jarro que tu tuviste la bondad de enviarme dos o tres que piensan ser enramadores, pues aquí nadie lo sabe hasta el día de S. Baudilio, 20 de mayo, en cuyo día el S. rector los publica en la misa mayor.
Este año he formado yo la candidatura y como solo hay dos días para prepararse, pues Corpus es el 22, lo he dicho a dos o tres para que se preparen para cirios que algunos ponen y yo, si el heredero Serra (de pagés) quiere ayudarme, pienso poner 300.
Lo que más me engorra es lo demás, pues no habiendo visto nunca tales enramamientos, no sé qué hacer para hacer una cosa vueva y, al mismo tiempo, que esté mejor que la de los demás, pues, según el S. rector, soy el fadrí més principal del poble y, por lo tanto, qusiera lucirme. Quisiera, al mismo tiempo una cosa seria y grave como mi oficio, pues no me gusta a mi un amontonamiento de cobrellits, cuadros, blochs y cosas bermellas, como presumo será por aquí.