Querido: si cabe agrabio en nuestra amistad, en la ocasión presente le tubiera, pues a·no ser lo contento que estoy y estaría si pudiesses estarte en nuestra compañía no te hubiera dado lugar a·que te mortificasses en hir a ella. Mi sentimiento solo es el no poder lograr de·tu comp[añí]a, pero como la logra otro yo, me queda este consuelo. No dejo de conocer aces·falta en tu casa, pero no tanto como dices en el ayuntamiento, pues este se toma y se deja quando se quiere, pues, a·mi parecer, no es tanta la sujeción de·la precisa asistencia quando quedan otros, aunque no en todo en parte·la pueden suplir. Si es en ot[r]a parte la falta, que tenga paciencia la parte, porque después de una borrasca biene la serenidad. Tu ausencia no me admirará sea ocasión de sentimiento a·los de cassa, pero como considero lograrán de tu comp[añí]a lo que se pudiesse, les será menos sensible. En·fin, tu dispondrás a medida de tu gusto en lo de essa tu casa, en la que jamás encontrarás que las voluntades de todos (los que la componen) tendrán otros deseos que de complacerte, igualmente que tu ver[dader]o amigo que de corazón lo es.
Timboni