Barna, 12 junio de 1824
Querido Miguel: recibí tu estimada y nos alegramos saber que te vas restableciendo, que a la verdad los tragos largos qe. habéis pasado nos tenía[n] con cuidado, que no te sobreviniese alguna novedad, mayorm[en]te habiéndote partido de Palafrugel por motivos tan fúnebres en el crítico estado de convalecencia, pero gs. al Altísimo que no se verificó y qe., según relación de Juan, mi hermano (qe. partió ayer de ésta para su casa) quedarás perfectam[en]te sano, sin temores de otro ataque, porqe. el pasado, según juicio de los facultativos, dimanó de cansa[n]cio y, assí, no reincidir a valentías de viajar a pie o la mayor parte del camino, qe. no estamos en los apuros de qdo. regresaste de prisionero ni los años son los mismos. Procura a conservarte que es lo que importa y divertíos con mi nieto, de quien todos se anemoran al verle, según me han informado, lo qe. me aumenta los deseos de poderle dar un bezo.
Quedo enterado de las 44 ll. que te entregó Figueras y dispondré de ellas quando se me presente oportuna ocasión. M[emoria]s de parte de toda esta mi familia qe. tanto se alegra de saber qe. te vas restableciendo y lo pasáis sin novedad, sólo lloran por Xaviercito que, según dicen, les tiene a todos el corazón robado.
Tu padre Fran[cis]co Roig