“Mi más estimada Franta”
Ella li hava escrit dos cartes l’11-9.
Una carta tota ratllada i nerviosa.
“siento en el alma el trastorno que has tenido por no haverte sido entregada la carta que te escriví desde Palafrugell que devía tranquilizarte para el estado de Papet y cómo él mismo te hacía una nota”.
Ha de ser un esborrany, perquè, si és una carta, en comptes de tranquil·litzar, provoca una inquietud mortal.
Li envia un collaret de suro.
“No sé con que motivo Grasot te ha dicho que yo estava trastornado quando yo disfruto más tranquilidad de lo que podía presumirse separado de ti y de mis tan estimados hijos”.
“No es de estrañar ta haya dicho que Papet estava en cama, que lo vio seguramente quando no estava vestido”.
“No creas a nadie y tranquilízate que Papet va siguiendo su enfermedad y el nuevo plan que hicieron los facultativos de Palafrugell, aprovado también por los que lo cuydan en Gerona me inspira mucha confiansa y a mi puesto tu harías otro tanto”.
“Todo quanto ocurra lo sabrás sea bueno, sea malo”.
“Si es favorable, para tu satisfación y si es caso contrario, no olvides el fruto que llevas uno en tus entrañas, que podrías hacer su ruyna, la tuya y la de tu esposo, que no sovreviviría a disgustos tan amargos”.