Vilasacra, 11 febrero de 1845
Sr. D. Fran[cis]co Plantés
Querido: a su tiempo recibí tus dos faboritas y dicimúlame el que no te haya contestado más pronto, pues, aguardando de día en día, ha transcurrido este tiempo velozmente, pero, ahora que mi cerebro se halla en la mayor calma (por ser tiempo de penitencia), me ocupo en felicitaros los más espresivos paravienes de vuestros adelantos y que me cabe la mayor satisfacsión de ser tío de un hijo que, con tanto afán, todos aguardabamos saliese sin mancha del seno materno, pero, gs. al Altísimo, se han satisfecho nuestros deceos. Tengo la feltra y es de las más buenas que se hacen, Espero dejarás venir a la Clara a recojerla, pues así me lo dijo mi madre que bajaría cuanto antes. También os reservo un fraquito de pomada para los cabellos.
Qué tal, cómo estamos de ayunos? Yo, para no acabarlos, he hecho una resolución de no empezarlos y, después que estoy estropeado de los bayles del carnabal y necesito recoperarme. Tu ya creo que ayunarás, pero la coleción que harás, seguramte. que tendrá la cola más larga que el contrapás. Así lo has de hacer si quieres triunfar de la cuaresma.
Siento no poderos enviar pescado, pues ni una escata no ha pasado.
A_dios. Memorias a tus srs. padres, un abrazo a la Clara y hermanos y mil caricias a mi sobrino y juntos mandad a tu coñado que os aprecia
José Moragas
