Mi más estimada y querida amiga: el mayor de los placeres, cual me prometo sabrá persuadirse, esperimenté a la lectura de su grata de Vd. del 18 corrientes. Efectiva[men]te no me dejó en la tranquilidad qe. esa de desear su anterior de Vd. del 26 del último abril, porque aunque veía en ella una espresión de su buen g[us]to, tampoco columbraba [sic] cuanto apetecía mi tierno corazón. Desapareció pues la densa nube qe. cubría mi espíritu al ver su citada última, toda vez qe. más esplícitam[en]te manifiesta Vd. su constante resolución de qe. nunca jamás había dudado. Y si bien leo en ella la prolongación del término de mis deseos, qe. ya considero también de Vd., me basta qe. sea esta su voluntad para qe. me conforme gustoso a ella y a qe. esta la mía aunada con la de Vd. y eso tanto más cuanto veo qe. su prudencia y criterio saben despreciar cual yo las hablil[l]as y chismes qe. siempre median en estos casos, de qe. no me puedo creer a cubierto y mucho menos en mi posición regular qe. no sólo escita émulos, envidias y sí aun enemigos espontáneos. En orden a sufrir perjuicio mis negocios con la dilación propuesta, debo confesar qe. efectiv[amen]te no se me siguen, pero tampoco debo ocultarla si no reporto perjuicios en general. Quizá, quizá los tengo en mi casa, qe. se halla puesta en manos mercenarias y Vd. más bien qe. yo sabrá justipreciarlo dar a ello su valor.
