Vich, 17 seti[em]bre de 1829
Querido Sisonet: se me ha hecho un encargo, por cuyo motivo te escribo ésta diciéndote que respecto a que la instrucción de contribuciones señala la retribución de un 6 % a los ayuntamientos para la recaudación, y que este 6 % debe repartirse en la forma siguiente: 1 ½ al cobrador, 1 al secretario y los 3 ½ restantes entre los individuos del ayuntamiento, ha ocurrido la duda de si entran también a participar de lo correspondiente al ayunt[amient]o los síndicos y los diputados. De esto quien podrá informarte bien es el s[eñ]or Torrella o el s[eñ]or se[creta]r[i]o Pérez Claras. Espero me darás razón de lo que te pido a vuelta de correo, pues conviene que sea pronto.
Desde que estoy libre del purgatorio de aquella casa me parece que estoy en el cielo. Esto debía suceder por precisión, pues desde aquel punto no puede irse a otro que a la gloria. Deseo que no hayas entrado en el primero, sino que derechito y andando te vayas al segundo, como se suele decir.
Estoy esperando un cargamento de fiscalías, zeladurías y otras cosas, pues desde que hablo o trato de estos negocios, aunque no hayan producido más que un 3 %, según manda Dios y nuestras sabias leyes, ya puede haberse formado un capital regular. Veremos Dios que nos dará. Nada tenemos de particular que meresca la pena de contarse.
Deseo continuéis en pasarlo bien y, con esp[resione]s a Dolores y demás, dispón de tu sincero amigo.
J[uan] O[liveras]