Tolosa, 5 de abril de 1847
V. J.
Mi siempre querido y amado padre: a su debido tiempo recibí su muy apreciada carta, la que me llenó de consuelo por aber tanto tiempo que no me había escrito, pero no pensaba por esto que me había olbidado, como Vd. dice, no, amado padre, porque ya tengo pruebas de hello.
Amado padre, siento mucho la enfermedad de Vd. y de mi querida madre, pero, amado padre, no puedo decirle otra cosa sinó que tanga Vd. mucha conformidad con la boluntad de Dios, mirando los trabajos como benidos de su divina mano y acordándose que Dios nos dará el cielo en premio de hunos trabajos tan cortos, a imitación de Dabid, que comía el pan mojado con las lágrimas, pero la sola esperanza de que sería rey le suabisaba todos los trabajos y Jacop dio por bien empleados siete años de trabajos por alcansar a Rabeca, cuánto más nos debe animar la esperanza de nuestra amada patria, a donde seremos felices por toda la eternidad. Yo no dejo de encomendarles a Dios en el santo sacrificio de la misa y en la sagrada comunión y les pido que hagan Vds. lo mismo por mi, para que cumpla bien con mis albl obligaciones. Estoy aprendiendo a·sangrar. He sangrado ya con las dos manos y pero adelante de la hermana que me enseña.
Los ayunos me han engordado bastante. Me hallo muy buena, gracias a Dios.
En ésta hace bastante frío, pero no es estraño, porque el Domingo de Pascua estaba nebando con tanto garbo como en el inbierno, pero por esto hemos pasado muy bien las fiestas. Yo deseo que Vds. pasen bien las que bienen.
Hace poco tiempo que supe que Sor Felipa estaba buena y muy contenta y el motibo de no escribir será por pereza.
Haga Vd. el fabor de cumplir de mi parte con el señor caño canónigo don Jaime Soler y con las hermanas del Hospital, familia de Picó, parientes y conocidos, sin olbidarse de los becinos y Vd. reciba finos afectos de todas las herm[an]as y de mi señora madre y manden Vds. como quier_era [sic] la última de sus hijas que de corazón los ama en los sagrados corazones de Jesús y de María,
Sor Dolores Salarich, Y. H. D. L. C. S. D. L. P. E.
[P.D.]: He sentido la muerte de mi amigo y no dejo de encomendarlo a Dios y dejo a su <su> disposición el cumplir de mi parte con su m madre y hermanos. A_diós amado padre.