Vich, 5 de feb[re]ro 1846
Mis amados hijos Luis y Valentín: no hos he contestado antes en la buestra apreciada por el motivo de mi aflicción por la pérdida de vuestro hermanito Ramon y tanto más dolorosa a sido para mi su pérdida, del modo tan orroroso q[u]e sucedió y lo mucho q[u]e padeció el pobrecillo las 48 oras q[u]e vivió, cosa q[u]e no vorraré de mi memoria en toda mi vida. Solo me mitiga la pena el pensar q[u]e gosa de la gloria, pero ciertos ratos al día no bastan las reflecciones. Lo mismo suceda a vuestra tía Teresita, la q[u]e de resultas se halla ahun en cama y muy dév[il]. Sólo se levanta dos días hace un par de oras a·la tarde, la q[u]e me encarga os saluda. Yo, a·pesar de q[u]e no me tu encuentro muy bien desde el funesto día del trastorno y espanto, pero no me a obligado aguardar cama y ahora tengo un poco más de apetito. Los demás siguen bien, g[racia]s a Dios, sólo Marianito, q[u]e esta tarde se a metido en cama por hallarse resfriado, pero confío no será nada, a·pesar de q[u]e ahora todo me alarma. Antes de ayer tomó al mando de alcald[í]a tu padre. Aga Dios lo pueda llevar con salud. Procurad vosotros a mantaneros con salud y otro día q[u]e no estaré tan aflijida saré más larga. Ésta sirva también para Valentín. Exp[resione]s a tu tío y sobrinos y sor de Subias. Hos ama de corazón buestra madre,
Antonia