Mad[ri]d, 19 de ab[ri]l de 1826
Mi muy querida tía: ni d[o]n Áng[e]l ni yo hemos podido decir a V. cosa alg[u]na de su asunto en estos días pasados, porq[u]e el s[eñ]or de Cambronero (sugeto muy ocupado, seg[ú]n V. ya sabe) ha tenido a su s[eñ]ora enferma de mucho cuydado y, con este motibo, no ha recibido a nadie, p[ue]s p[o]r más q[u]e hemos echo p[ar]a ver si podíamos hablarle, no lo hemos logrado hasta hoy, q[u]e nos ha d[ic]ho queda enterado largam[en]te de los papeles q[u]e le entregamos y q[u]e mañana bolbamos q[u]e hablaremos despacio y nos dirá su parecer.
Por el q[u]e sigue daré a V. exacta noticia de lo q[u]e nos haya dicho y V. no pase cuydado p[o]r lo q[u]e pueda intrigar en ésta su cuñada, p[ue]s, además de q[u]e no dejaremos piedra p[ar]a mover, espero en Dios hará venza la justicia y no la maldad.
Confieso a V. me ha sorprendido tanto los procederes de esa s[eñ]ora contra V., quanto el testamento de mi tío (q[ue] e[n] p[az] d[escanse]), y de éste y demás papeles entregados a Cambronero saqué copia a costa de un mal rato q[u]e me dí p[o]r la cortedad de t[iem]po, p[o]r si tenemos alg[un]a duda d[o]n Áng[e]l o yo saber a dónde poder acudir con prontitud p[ar]a salir de ella.
Esté V. cierta q[u]e p[o]r mi no sabrá nadie nada hasta q[u]e se haya dado el golpe, q[u]e haré p[ar]a complacer a V. quanto pueda y q[u]e a d[o]n Áng[e]l no le dejaré descansar a sol ni a sombra.
No puedo ser más largo, tía mía, p[ue]s me precisa asistir al funeral de un buen amigo q[u]e se ha muerto, el conocer se notaría mi falta.
Me alegro no tenga V. novedad y, recibiendo mil expresiones de d[on] Áng[e]l, disponga V. quanto quiera del cariño q[u]e le profesa este su sob[ri]no y s[eguro] s[ervidor] q[ue] b[esa] s[us] p[ies],
José Mª Borrás y Valls Frexa